Cremas Solares

¿Quieres proteger tu piel adecuadamente? Usa el FPS más recomendable. ¿Pero cuál? El FPS más recomendable de aplicar es el que necesita tu piel. Es decir, dependiendo de nuestro tipo de piel, necesitamos un FPS u otro.

Si nuestra piel posee más melanina no será necesario un FPS muy alto pero si nuestra piel posee menos melanina, es decir, es más blanca, se quema con más facilidad y no se suele broncear, debemos usar un FPS más alto. 

El FPS que vamos a recomendar siempre y para cualquier tipo de piel es el FPS más alto como el SPF 50 de amplio espectro. Este factor de protección solar es el que nos asegura con mayor probabilidad que nuestra piel recibirá menos radiaciones dañinas. La etiqueta de amplio espectro indica que el protector solar protege de los rayos UVA y UVB.  

Sin embargo, si buscas que la melanina haga su trabajo para conseguir un bronceado más notable puedes optar por SPF más bajos. No obstante, ten en cuenta que al usar un FPS más bajo y que no sea de amplio espectro, estarás protegiendo tu piel solo contra quemaduras pero no del envejecimiento prematuro ni del cáncer.

Existen distintos protectores solares, con distintos formatos, texturas y factores de protección y es bastante posible que nos hagamos un lío entre tanta variedad. ¿Cuándo debemos usar uno y otro? ¿En qué momento lo tenemos que aplicar? Son preguntas muy frecuentes. 

En este caso, hablamos de la leche solar. La leche solar debe ser tu opción cuando buscas un protector solar que se aplique fácilmente y se absorba rápidamente gracias a su textura fluida. Además, gracias a su composición, este tipo de protector solar proporciona mayor hidratación. 

¿En qué momento debemos aplicar la leche solar? El momento para aplicar el protector solar es después de aplicar la crema hidratante para finalizar la rutina de skincare y actúe como barrera protectora de la piel. 

Cuando estamos en la playa o piscina, sigue las instrucciones de cada protector solar para aplicar con antelación antes de que te expongas al sol. Debes aplicarla con frecuencia (cada 2 horas) para que la piel no se quede desprotegida en ningún momento. Después de cada baño o que se haya dado la situación de transpiración, debes volver a aplicar el protector solar cada 40-80 minutos. 

Existen también otras situaciones donde es obligatorio usar leche solar aunque pensemos que no y no parezca necesario:

Si no hace calor. Aunque gracias al aire o al agua no haga calor, los rayos pueden pasar perfectamente y penetrar en tu piel.

Si está nublado. Aunque no haga sol, la gran mayoría de las radiaciones solares traspasan las nubes y llegan a la piel. 

Si tu piel es o está morena. El moreno reduce el riesgo de quemaduras pero no te protege contra los rayos UVB ni los rayos UVA. 

En la aplicación reside el secreto. Hablemos. ¿Cantidad de protector solar? Si estás usando una loción solar, aplica por el cuerpo una cantidad equivalente a una pelota de golf. Aplica y extiende por la piel hasta que esta se absorba. 

Presta especial atención a zonas como los párpados, las orejas, el cuello y la parte superior de pies y manos. ¡También se queman! Además, hay zonas que son muy propensas a experimentar de forma temprana envejecimiento prematuro. 

Para la cara, aplica lo equivalente a un níquel y extiende sin dejar ningún rincón y conseguir una cobertura uniforme. ¡Listo! 

Se escucha mucho que usar crema solar tiene beneficios muy importantes para nuestra salud. Si todavía dudas de la conveniencia de usar protector solar, repasamos sus ventajas. 

El beneficio más importante que hay en usar protector solar día a día es cuidar la piel y mantenerla sana. ¿Cómo? Reduciendo el riesgo de sufrir enfermedades como el cáncer de piel pues el protector solar nos protege como un buen escudo de radiaciones tóxicas para nuestra piel como los rayos UVA y UVB. 

Para ser conscientes del efecto de la crema solar y del sol en nuestra piel, es crucial saber que el sol oxida nuestra piel y puede ser el origen de las indeseables quemaduras, arrugas y manchas. ¡Qué horror! Como muchas veces habrás escuchado, la piel tiene memoria, amiga. ¿Sabías que el 80% del envejecimiento prematuro de la piel es causado por el sol? Por lo tanto, si quieres que tu piel siga lo más bonita y radiante posible, ¡usa crema todos los días! 

Otra ventaja es que consigues un bronceado más sano y duradero que aquel que consigues poniéndote como una gamba un día de playa o piscina. Por último, usar crema solar tiene otro plus: hidrata la piel. Sí, amiga. Además de protegernos, nuestro querido protector solar es capaz de conseguir una piel más hidratada y suave, libre de asperezas y sequedad.